La naturaleza nos ofrece mil y un maneras de sanar y embellecer nuestro cuerpo, mente y espíritu. La aromaterapia se basa en este principio haciendo uso de los aceites esenciales extraídos de las plantas aromáticas para darle a nuestra piel tersura, elasticidad y luminosidad.
Cada gota de aceite contiene todas las propiedades de la planta de la que es extraído. Sus componentes penetran el cuerpo a través de la piel, mejorando su aspecto desde lo más profundo. Y como toda esencia relajante, surte mayor efecto en forma de masajes, compresas, baños y cremas.
Los aceites tienen poderes calmantes y estimulantes. En forma de masajes se utilizan para calmar dolencias y limpiar de toxinas el sistema linfático. La clave es no aplicar directamente sobre el cuerpo, sino frotar las sustancias en las manos hasta que estén a temperatura corporal, procurando remover suavemente el contenido para que la mezcla sea más concentrada.
Las propiedades de cada aceite son únicas, pero al combinarse con otros su efecto se intensifica y se hace notar en la piel en todo su esplendor. Así que cuando estés cansado después de un largo día de trabajo o una intensa jornada de ejercicios o sientas que tu piel está seca o simplemente cuando te provoque, llena tu bañera de agua tibia con unas gotas de los aceites que más te gusten y sumérgete en su placentera esencia.
Fuente: Enbuenasmanos.com
Imagen: Telva.com
Tags Blogalaxia: Belleza, Salud, Piel, Aromaterapia, Aceites Esenciales.
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