¿Realizas un arduo trabajo físico que puede comprometer la salud de tus manos? ¿Quizá nos las proteges adecuadamente de los rayos solares? ¿O tal vez el paso del tiempo juega en su contra?
Ya sea por el trabajo, el clima o la edad, generalmente nuestras manos son las más perjudicadas por nuestra falta de atención y su efecto se traduce en un aspecto nada estético.
La melanina es la responsable del color que tiene nuestra piel. Muchas veces los factores ambientales o nuestro propio organismo hacen que su producción varíe y haya una pigmentación descontrolada en algunas partes del cuerpo, sobre todo en las que no reciben los cuidados necesarios, como nuestras manos.
La falta de hidratación es una causante del envejecimiento prematuro y del posterior surgimiento de manchas. Para evitar que ello le ocurra a nuestras manos, debemos aplicarnos bloqueador solar diariamente y durante todo el año. Aparte de evitar esas feas manchitas, el protector les dará una suavidad y elasticidad únicas. Y paralelamente, debemos usar en la noche una crema para manos con colágeno, ya que durante este tiempo dicha sustancia -con efecto antiarrugas- es absorbida mejor.
En caso ya te hayan aparecido manchas, puedes aplicarte en las manos una mezcla de limón y azúcar todos los días por varios minutos. Esta receta funcionará si no son muy oscuras. Pero si su estado es más grave, puedes recurrir a un tratamiento láser de hiperpigmentación, en el cual se lanzan pulsos de energía hacia las manos, consiguiendo que el pigmento de las manchas se destruya y se vuelva al estado normal.
Fuente: Verselinda.com
Imagen: Nlm.nih.gov
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