Instrumentos para un maquillaje perfecto

Siempre le damos mucha importancia al producto que usamos para maquillanos, la marca, el color, la textura… sin embargo para lograr el efecto deseado es necesario usar los instrumentos apropiados.

Las brochas y los pinceles son el arma secreta, varitas mágicas que no deben faltar en nuestro estuche de maquillaje ya que con ellas podemos crear una obra de arte en nuestros rostros. Saber cómo usarlos es básico y servirán para aplicar el lapiz de labio con precisión o lograr el efecto deseado con las sombras.

Así como un pintor necesita diferentes tamaños y tipos de pinceles, nosotras también necesitamos instrumentos para aplicar el color en nuestro rostro y debemos saber el uso correcto de cada uno.

Pincel alargado de cerdas cortas: Es ideal para aplicar colores claros y difuminar las sombras en el pliegue del párpado. Sirve también para matizar colores oscuros con colores claros. Se usan principalmente en las zonas amplias del párpado, cerca de la ceja.

Pincel con esponjita: Sirve para aplicar sombras. La esponja absorbe el color para poder extenderlo en mayor cantidad sobre el párpado. Es ideal para aplicar colores oscuros ya que logra profundizar y dar más forma al ojo.

Brocha gorda: Es utilizada principalmente para aplicar los polvos y retirar el exceso de éstos que sean aplicados con la mota. Siendo los polvos una parte muy importante dentro del maquillaje, al aplicarlo se debe tomar el polvo con la parte lateral de la brocha y aplicarlo en el rostro como si lo acariciáramos, partiendo desde el centro del rostro hacia afuera en forma de estrella.

Brocha para rubor: No es tan gruesa como la brocha para polvos, las cerdas son medianas y redondeadas. Se debe tomar el rubor con la parte lateral de la brocha y aplicarlo en movimientos ascendentes. Se debe tratar de aplicar el color de «poco a mucho» sacudiendo la brocha luego de tomar el rubor y así se lograrán maravillas, si se hace lo contrario habrá luego que remover el exceso de rubor del rostro.

Pincel de labios: Tiene cerdas muy delgadas y se usa para definir el color, obteniendo un resultado profesional. Las cerdas delgadas del pincel toman la cantidad de labial necesaria y permiten una mayor penetración del color homogeneizando los labios. La forma en punta del pincel servirá para delinear con precisión y no salirse de los contornos.

Rizador de pestañas: Básico para aquellas que tengan pestañas extremadamente lacias y hacia abajo. Se debe usar desde el nacimiento de las pestañas hasta llegar a la punta, ya que no queremos que queden cuadradas.

Esponjas: Se usan para lograr transparencia en el maquillaje y cobertura perfecta sobre el cutis. Al usarla los movimientos deben ser siempre ascendentes desde el centro del rostro hacia afuera. Hay que tener en cuenta que dependiendo del tipo de maquillaje, algunos se aplican mejor con los dedos.

Cepillo para cejas y peine para pestañas: El cepillo para cejas se usa para lograr que los ojos se vean más abiertos al peinar las cejas hacia arriba. El peine de pestañas elimina el exceso de rimel y hace que éstas se vean naturales.

Fuente: Revista Buenhogar

Imágenes: Makeupcreations.com, Macys.com, Alconeco.com

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