Todo lo que debes saber acerca de la exfoliación

La exfoliación es el tratamiento que nos ayuda a retirar las células muertas de la epidermis. Las ventajas que nos brinda son el lucir una piel más fresca y brillante, la mejor penetración de los ingredientes activos de los productos para el cuidado de la piel y, para las personas de piel grasa, una reducción de la oleosidad.

Es discutible si la exfoliación reduce o no las líneas de expresión, pero por lo general no ayuda a eliminar arrugas significativas ya que sus efectos no alcanzan la dermis, que es donde estas se forman.

¿Cómo y quién puede beneficiarse de una exfoliación? Las ventajas de realizar una exfoliación a nuestra piel no son universales. En primer lugar porque naturalmente la piel se exfolia continuamente, si no fuera así las células muertas se acumularían. La frecuencia con que nuestra piel se exfolia naturalmente es mayor cuando se es más joven, por lo tanto, los jóvenes generalmente no necesitan de la exfoliación.

Sin embargo hay muchas personas que siendo aún jóvenes lucen una piel opaca y sin vida debido a la acumulación de células muertas y sí necesitan de este tratamiento, ya que la exfoliación ayuda a reducir grasa en la piel las personas de cutis graso se beneficiarán con ella. Por otro lado, la exfoliación puede causar irritación en las personas de cutis seco y/o sensible, por lo que deberían abstenerse o usar exfoliantes muy suaves y solo de vez en cuando.

¿Qué tan seguido es bueno exfoliar nuestra piel? Excepto para las personas con la piel muy grasa, la exfoliación diaria no es una buena idea. El objetivo es eliminar las células muertas de la superficie de la piel, estas células toman unos días para acumularse. Si nos exfoliamos más a menudo de lo que las células muertas demoran en acumularse podemos eliminar demasiadas células vivas, aumentando la posibilidad de dañar e irritar nuestra piel.

Para la mayoría de las personas que deciden exfoliarse con un par de veces por semana es suficiente, pero cada persona debe determinar cuál es la frecuencia ideal basándose en su tipo de piel, la fuerza del exfoliante que usa y la técnica de aplicación.

Si observamos irritación, aumento de la sensibilidad o sequedad, probablemente estemos exfoliándonos con mucha frecuencia o el producto que estamos utilizando no sea el indicado. Es importante recordar que la irritación crónica y el daño de la piel por el uso excesivo de exfoliantes pueden contribuir al envejecimiento de la piel. Seamos prudentes: escuchemos a nuestra piel, usemos el sentido común e informémonos antes de probar cualquier nuevo tratamiento.

Fuente: Smart Skin Care

Foto: Beauty Tips and Advices

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