Precauciones que debes tomar antes de someterte a una cirugía estética

Entrar a un quirófano para someterse a una cirugía estética es algo casi cotidiano en estos tiempos. Sin embargo, la prisa por verse y sentirse regias no es motivo para ignorar ciertas precauciones básicas. Si estás a punto de someterte a una operación estética, sugerimos poner atención a los siguientes puntos para evitar malas experiencias:

Antes de someterte a una cirugía y cambiar tu apariencia permanentemente, hay algunas precauciones que debes tomar

Despeja dudas

Cuando llegues a la clínica de tu preferencia, asegúrate de recopilar toda la información sobre el tipo de cirugía que tienes en mente. Recuerda que no todos los cuerpos responden de la misma forma. Consulta no solo los beneficios, sino también los riesgos que surgirían durante el procedimiento médico. Todos estos datos deben quedarte más que claros, así que no temas en preguntar.

Selecciona profesionales y condiciones idóneas

El éxito de esta actividad médica ha hecho que a la par surjan centros con personas que no están capacitadas profesionalmente para este ejercicio. Por ello, cuando selecciones un cirujano plástico busca a alguien con título oficial de especialista y que esté afiliado a la Sociedad Peruana de Cirugía Plástica.

Asimismo, el quirófano debe contar con requisitos indispensables que garanticen tu integridad y bienestar en caso de emergencias, como la posibilidad de transfusión, transporte y cuidados especiales o intensivos.

Verifica las condiciones en las que se realizará la cirugía

Solicita citas médicas previas

Las evaluaciones previas a la cirugía estética no solo deben limitarse a detectar tus problemas físicos o a explicarte cuáles serán los resultados. Es de suma importancia que te hagas pruebas preoperatorias, como estudios electrocardiográficos, analíticos y radiológicos. Adicionalmente, se deben agregar estudios más específicos y que se amolden a tus antecedentes médicos y al tipo de operación.

Sé responsable con esta decisión

Si tienes en mente arreglar tu físico para recuperar una pareja, tener más éxito laboral, complacer a tu pareja porque ya no te ve tan joven, entre otros asuntos que ya lindan con lo psicológico, deberías pensarlo mejor. El objetivo es cruzar la puerta de la sala de operaciones emocionalmente estable y motivada únicamente por el hecho de sentirte bien contigo misma. Ten en cuenta que el cirujano no es un mago, sólo puede mejorar las formas físicas, no los problemas familiares o del alma.