Cómo tratar las infecciones urinarias

Por ser naturales a nuestro organismo, las necesidades fisiológicas deberían satisfacerse de manera sencilla. Sin embargo, las propias condiciones de vida y costumbres ponen en riesgo nuestra salud y hacen que algo tan simple como eliminar líquidos sea una tortura orgánica.

Las vías urinarias se encargan de recoger, almacenar y eliminar la orina del cuerpo. Y al infectarse cualquiera de sus órganos, sus funciones se alteran y experimentamos un doloroso ardor e incomodidad (y no solo al momento de orinar) que se incrementan a medida que pasa el tiempo.

Como las infecciones se producen normalmente a causa de bacterias, hay que tratarlas con antibióticos (pastillas o inyecciones) por unos cuantos días. Sin embargo, en el caso de las mujeres existe mayor probabilidad de contraerlas nuevamente, sobre todo cuando su edad es avanzada o están embarazadas.

Entonces es necesario desarrollar algunos hábitos que impidan el retorno de la afección o ayuden a prevenirla. Dado que los gérmenes se acumulan en la orina, hay que ingerir la mayor cantidad de agua (de 6 a 8 vasos diarios en promedio) para eliminarla rápidamente.

Por su grado de acidez, el consumo de vitamina C (naranja, mandarina, etc.) disminuye la acción de las bacterias, así como el orinar cada vez que lo necesitemos. No hay que aguantar las ganas de ir al baño. Y al limpiarnos debemos hacerlo de adelante hacia atrás, especialmente luego de una deposición.

Como consejo femenino, evitemos usar prendas sintéticas ni apretadas porque concentran la humedad que favorece el desarrollo de los microbios. El algodón es un excelente material para la ropa interior y se puede usar con comodidad en cualquier época del año.

Fuente: National Kidney and Urologic Diseases Information Clearinghouse

Imagen: La Redoute

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