Cirugía con hilos rusos para modelar el rostro

Las arrugas son la muestra más aparente de que el paso de los años nos cobra su factura. Y aunque es inevitable que ello ocurra, a nadie le gusta que el proceso de envejecimiento sea prematuro o se acelere. Menos cuando hay alternativas muy efectivas para gozar de una piel tersa y lozana por más tiempo.

Como el resultado exterior es reflejo de la parte interna, la cirugía con hilos rusos -también llamados tensores- permite levantar los tejidos para desvanecer los surcos de la superficie de la piel y así modelar las partes -especialmente del rostro, aunque también se usa en los glúteos– anteriormente caídas.

Los hilos rusos están elaborados con polipropileno, que es de gran resistencia y no produce reacciones negativas en los tejidos. Al introducirlos en la dermis por las guías marcadas por el médico se tensionan los tejidos profundos, dando lugar al tan ansiado estiramiento.

La cirugía dura aproximadamente una hora después de la cual el o la paciente va a su casa a descansar y tomar antinflamatorios y antibióticos para retornar a sus actividades en poco tiempo.

De este modo podremos lucir unas cejas arqueadas, pómulos afinados o un derriere elevado y redondo. Pero siempre siguiendo las indicaciones del cirujano y previo examen físico que determine si esta intervención resolverá nuestro problema o necesitamos de otro tipo de operación.

Fuente: Dr. Marcelo Bernstein

Imagen: Vanidades

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